Por Monserrat Martínez
“La importancia de reconocer los derechos de la población migrante, tendría que estar fundado mucho, en que todos hemos sido y somos migrantes” comentó el Dr. Álvaro Alcántara López a Paralelo90 en el marco de la Jornada sobre el día Internacional de los Afrodescendientes.
El 31 de agosto se celebra el Día Internacional de los afrodescendientes -declarado por la ONU desde del 2020 – y Veracruz, una de las regiones que construyó su cultura en conjunto con la población afro, celebró la Jornada el 27 y 28 de agosto organizada por la Universidad Veracruzana.
Desde las conquistas de los siglos XV y XVI, la trata esclavista trajo de las regiones africanas (del lado del océano atlántico) a miles y luego -descendiendo a mitad del siglo XVII- a cientos de personas de la población afro a México. Llegando por la costa veracruzana, la mayoría se quedaron para trabajar en la producción azucarera y tabaquera, así, entre 1490 y 1880 ya eran alrededor de 12 millones de personas las que habían pasado por el territorio, con el tiempo, más libres que esclavas.
Pronto dejaron de ser un grupo aparte y nuestras mezclas alcanzarían varias denominaciones (etnónimos) como: Negro, Congo, Anchico, Mina, Jolofo, Carabalí, Mozambique y Cafre. “Tenemos la enorme fortuna de vivir en un país que es pluricultural y pluridiverso, en muchos sentidos, y la clave, estaría en reconocer esas diversas herencias […] de los pueblos llamados indígenas, pero también otras de las que se habla poco en este país, como las migraciones gitanas, coreanas, libanesas y por supuesto las diferentes herencias africanas […] Seguir pensando que hay una herencia más importante o que da más caché que otra, me parece francamente un error” explicó el Dr. Alcántara.
Con base en su especialización e investigaciones llevadas con los compañeros del Centro INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), compartió acciones afirmativas con las que podríamos abrazar estas raíces. Por ejemplo, trabajar para que estas historias negadas durante mucho tiempo se incluyan en los libros de texto, tener un museo dedicado al tema, lograr que Mocambo sea reconocido como un sitio de memoria, y por supuesto, los trabajos que activistas hacen a favor del reconocimiento y visibilidad, respeto y derechos de la población afro.
Las migraciones que fueron clave para el desarrollo de quienes somos hoy, hacen pensar en las que vienen ahora desde el sur de Argentina, personas que esperan llegar a la frontera con Estados Unidos, pero muchas de ellas terminan quedándose en el territorio nacional. “Hace todo el sentido, porque si de algo sirve el pasado es para entender mejor nuestro presente […] Estamos viviendo nuevos procesos de afro descendencia y yo esperaría que en este país tengamos el respeto, la sensibilidad, la educación para acoger, apoyar a todas esas personas que han tenido que salir de sus lugares de nacimiento, de origen de crianza, para intentar formarse un mejor futuro”, comentó el Dr. Alcántara a Paralelo90.